El pasado día 31 fuimos muchos los que nos asombramos ante las estratosféricas marcas conseguidas por los ganadores de la San Silvestre barcelonesa (Cursa dels Nassos). Por un lado, Carles Castillejo marcó un crono de 28'41" (2'53"/km), mientras que la ganadora, Rosa Morató, cruzó la meta en 32'06" (3'13"/km). Las dos son marcas dignas de un campeonato mundial de fondo en ruta.
En los últimos días un amigo me comentaba los rumores de que la 'sansi' de Barcelona es algo más corta (unos 200 m. menos), pero personalmente no he encontrado fundamento para asegurar que sea así: la distancia está oficialmente certificada, y en mi caso no observé que ningún kilómetro fuera 'sospechoso'. Lo que sí es verdad es que se trata de un circuito ideal para hacer marca: es prácticamente llano, y los últimos kilómetros tienden a bajar (insisto: son descensos muy leves), con la ventaja psicológica que eso representa.
La verdad es que el historial de los ganadores despeja cualquier duda. Castillejo ha corrido en 2009 en 27'38" los 10.000 en pista, y tiene (perdón, tenía) un registro de 28'47" en los 10 km en ruta. A sus 31 años, aún le queda recorrido para hacer grandes cosas. Por cierto, sorprende que Castillejo fuera capaz de correr los últimos 5 km... ¡40 segundos más rápido que los primeros! (14'40" / 14'02").
Lo mismo puede decirse de Rosa Morató: hasta el momento tenía una mejor marca de 32'31" en los 10 km (2004), registro que ha pulverizado en Barcelona. Su prueba son los 3.000 obstáculos (fue una de las pioneras en España, y tiene una marca de 9'26"). Teniendo en cuenta que ya fue 8ª en el Mundial de Osaka'07 y 12ª en los Juegos de Pekín, a sus 30 años Morató tiene aún mucho futuro por delante. Conociendo su trayectoria, sospecho que estos 32'06" de Barcelona han sido sólo el principio de su explosión.
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