Un año más, ayer nos plantamos miles de corredores ante la línea de salida de una San Silvestre, la última carrera del año. Yo corrí la de Barcelona, y tengo que deciros que fue una inyección de ánimo y buen rollo para afrontar las últimas horas del año.
La verdad es que temía notar los efectos del resfriado de los últimos días, pero afortunadamente, y como pasa tantas veces, las carreras diluyen cualquier dolencia y acabas por olvidarlo. Tampoco aparecieron las molestias en gemelo y lumbares, que como un fantasma amenazador hacen acto de presencia cuando menos me lo espero. En definitiva: que corrí una plácida carrera de 10 km, con buenas sensaciones.
Mi objetivo inicial era prudente: mejorar los 49'50" del año pasado, aunque sabía que podía hacerlo bastante mejor, en realidad. Digamos que no quería obligarme a ponerme un objetivo exigente, aparte del más importante para mí, que era disfrutar. Salí con la idea de correr en 47-48', y marqué el primer km en 4'45". Para qué engañarnos: ése es el ritmo que me toca con los entrenamientos hechos hasta la fecha, porque tampoco puede decirse que me haya portado muy bien en ese sentido...
Como no las tenía todas conmigo, me conformé con mantener ese ritmo y pasé por el km 5 en 23'50". Me sentía con fuerzas, así que apreté muy ligeramente en la segunda mitad y, cuando llegamos a la Diagonal (km 8 aprox), ya sabía que iba a correr en 47' sin problemas. Tengo que confesar que me dejé ir sin muchas ganas de sufrir, así que acabé en 47'26" (4'45" de media). Para mí, lo más importante es que crucé la meta feliz y satisfecho por las buenas sensaciones y porque sé que, dentro de poquito, estaremos ya en los 45'.
Hubo buen ambiente en la cursa, y como siempre hubo también quien se atrevió a correr semidesnudo, o disfrazado, o con una bandera del Barça... fue una tarde divertida y una manera saludable de acabar el año, ¿no creéis?
Además, tengo la impresión de que, teniendo en cuenta la alta participación -unos 9.000 corredores- la organización estuvo a la altura. No hubo grandes aglomeraciones en la llegada. Aunque, eso sí, hubo un poquito de caos en la salida...
¡Ah! No quería olvidarme de felicitar a varias de las personas que seguís este blog: Carlos, que hizo el carrerón de su vida con 35'53"; Jordi, que en su primera carrera de 10 km marcó 46'30"; Xavi, que en su única cita anual con el asfalto volvió a acabar dignamente... ¡Ahora toca recuperarse y seguir disfrutando dle running!
Sobre las clasificaciones, la organización ha tenido el acierto (creo yo) de hacer una clasificación popular por tiempos reales, eliminando así el 'gap' entre los que se colocan delante y los que se colocan detrás. Lo importante es en qué tiempo acabas.
Como me dijo ayer mismo un colega, la grandeza de este deporte es que el segundo de la general puede acabar en 28 minutos sintiéndose como una mierda, y tú puedes irte a casa feliz porque has hecho marca con 50 minutos.
Totalmente de acuerdo.
3 comentarios:
Acabar el año con buenas sensaciones es importante.. Felicidades y ahora a continuar con la progresión..!!
Enhorabuena, me alegro de que acabaras el año con esas sensaciones, eso te tiene que servir para motivarte y seguir progresando. Hiciste una buena carrera y si sigues por ese camino en poco tiempo te meterás fácilmente en los 45' que te propones a corto plazo. Quién sabe si será en la Cursa de Sant Antoni...
Gràcies, companys! Eso espero. Tengo 'mono' de volver algún día a correr rápido. De momento, mi objetivo seguirá siendo 45'. Hoy he corrido 7 km y no quedaba ni rastro de la carrera, así que supongo que realmente tengo margen. ¡A seguir disfrutando!
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